Boogui mi mejor amigo.

A veces nuestro mejor amigo nos escucha y nos entiende aunque no nos puede hablar, sus abrazos son sinceros y siempre nos perdona aunque seamos mal agradecidos... Ah si y muchs veces tienen colita y cuatro patitas.

Osmar M. Hernandez Alvarez.

3/18/20244 min read

Hoy estoy aquí para contarles una historia, la historia de un perrito que llamé Boogie, Boogie fue un perrito que nació de una perrita de raza mixta, nada especial en realidad, ella era de patitas cortas y hocico puntiagudo, quizás lo más especial de la perrita era que se emocionaba mucho cuando veía llegar a mi mamá a casa, movía su colita y enseñaba sus dientes y parecía que sonreía y puedo jurar que a veces cuando chillaba de emoción casi se le podía escuchar que decía mamá, se los juro de verdad tal así que la llamábamos Cusca, lamentablemente la Cusca murió junto con sus cachorros bajo las llantas de un conductor irresponsable enfrente de los parqueos de los transportes Sandy, pero unos años antes de ese suceso había tenido otros cachorros y en casa nos quedamos con uno de color café, que tenía patas cortas, cuerpo alargado y orejas largas, no se parecía a su mamá, a ese cachorro lo llame Boogie, a veces me sentaba en la banqueta de la casa y el perro se sentaba a mi lado, le sobaba sus orejas y se dormía un rato, en una ocasión iban pasando uno señores Mormones obviamente extranjeros y en su español medio masticado me dijeron, que bonito perro como se llama? Boogie les respondí, medio sorprendidos me volvieron a preguntar y les volví a responder Boogie, se rieron un poco y se despidieron, me dio curiosidad saber que significaba Boogie pero no encontré respuesta en los diccionarios de inglés, porque pensé que era una palabra en inglés, a principios de los 90s no había acceso a internet y no investigue más, pero a inicios de los años 2,000 el acceso a internet era más fácil, investigue de nuevo y descubrí que Boogie no era una palabra en inglés, era una palabra en Danés y significa Mover el esqueleto o sea bailar medio alocado, en una ocasión buscando imágenes para una tarea del instituto donde estudie me topé con una foto de un perro idéntico al mío, leí la referencia y decía que era un perro salchicha de raza Teckel, muy populares en Europa, obviamente mi perro no era de raza pura pero tenía esas características, a mí me gustaba ir a escuchar cantar a los pájaros y quería que mi perro me siguiera pero el seguía más a mi mama que a mí, la razón era que ella le daba de comer más veces que yo, así que era más fiel a ella que a mí, a veces le ponía su collar y me lo llevaba con su correa al río o al bosque, una vez estando en el río yo quise cazar un pez a machetazos pero el machete rebotó en una piedra y corte s mi perro en su hocico, solté el machete y lleve a mi perro al agua para limpiar su herida, suena tonto pero después de lavar la herida lo bese en la frente y le pedí disculpas, en otra ocasión me lo llevé al bosque y estaba paro encima de unas hojas secas cuando mi perro empezó a gruñirme, lo regañe pero en vez de calmarse ladró y de repente vi como las hojas se agitaban a mi lado, el perro saltó, metió su hocico en las hojas y vi como con sus dientes mordió una culebra, la agitaba de lado a lado y la soltaba, era increíble ver esa escena pero el perro ataco a la culebra hasta que la mató, después hacia sonidos como de estornudos y con su lengua se limpiaba los dientes y babeaba un poco, no sé si la culebra era venenosa, pero ese día el Boogie me salvó, esa vez también me comprometí a tratar mejor a mi perro, otras veces que salí al monte ya no encadenaba al perro para que me siguiera, El me seguía por su cuenta, pasaron unos años y llegó mi momento de salvarlo a él, porque alguna persona mal intencionada tiro carne con veneno en la calle, ese día murieron varios perros de los vecinos, yo no sabía que hacer así que hice lo único que se me ocurrió, disolví dos alkaselzer en un poco de agua y le heche dos o tres limones, no sé si fue suerte o un milagro pero al cabo de varias horas el perro había vomitado varías veces, le limpie el hocico con un trapo viejo y mi perro sobrevivió por muchos años más, hasta que sus fuerzas fueron disminuyendo, mi perro ya era un anciano, tenía quizás 13 o unos 16 años de edad, dicen que es equivalente a unos 80 años humanos, no lo sé, para ese entonces yo ya trabajaba y un día mi tía me llamó y me dijo, tu perro esta echado en el patio desde la mañana y no se levanta, ya le di comida y agua pero no quiere nada, entonces fui a verlo, al verme medio movió su cola, estaba frío y un poco rígido, sabía que estaba muriendo, tenía Cheles en sus ojos y mocos en su nariz, con mi camisa le limpie los ojos y su nariz, lo tape con un trapo lo abrace y le dije, ya te puedes ir Boogie, fuiste un gran perro, gracias por acompañarme y por salvarme la vida, le volví a besar su frente, lo abrace para que supiera cuanto lo quería, lo deje descansar y me fui a trabajar, unas horas más tarde mi tía me avisó que El Boogie se fue a mover el esqueleto al más allá, algunas veces sueño con el Boogie el perro que me salvó la vida y con la Cusca, la perrita que decía mamá cuando sonreía y movía su colita…

MI AMIGO BOOGUI